Marcela Hernando: "Hoy las condiciones laborales permiten que las mujeres puedan proyectarse en minería"

La ministra de Minería destacó los avances de la iniciativa público-privada que aborda la Mesa Nacional Mujer y Minería e indicó que se han implementado mejoras en distintos fondos concursables para incrementar el acceso de financiamiento público a las mujeres.

En una edición especial de Reporte Minero y Energético en este mes de la Mujer y Mujeres en la Industria, la ministra de Minería, Marcela Hernado, reconoció el desafío de representar a todas las mujeres que laboran en minería en los más diversos ámbitos, “representarlas a ellas y que se sientan orgullosas también de ser parte de esta industria que es tan importante para Chile” explicó en un sector que aseveró aún muy masculinizado, no sólo en Chile sino en todo el mundo. 

A modo de contexto, agregó que en “los 70 años de historia del ministerio, ha habido 53 ministros, de ellos 50 han sido hombres y solamente tres mujeres. Mis antecesoras Karen Poniachick, quien falleció el año pasado y Aurora Williams, ambas mujeres que han contribuido al desarrollo de la industria más allá de su gestión en el ministerio”.  

De profesión, la ministra Hernando es médico cirujano, posee cuatro magísteres, e inició su trayectoria política comenzó en la región de Antofagasta. En este camino ha destacado por abrir camino para otras mujeres de la región, siendo la primera mujer directora regional de Servicio de Salud; la primera seremi de Salud; la primera intendenta regional y la primera alcaldesa electa de la comuna de Antofagasta, entre 2008 – 2012.

Posteriormente, fue diputada representando región de Antofagasta, siendo la primera mujer militante del Partido Radical en ser electa a nivel nacional en cincuenta años. Durante su gestión parlamentaria presentó más de 420 proyectos de ley en la Cámara Baja; además integró la Comisión de Minería y Energía durante cuatro años, siendo su presidenta en 2019. En marzo de 2022 asume como ministra de Minería del Gobierno del presidente, Gabriel Boric Font. 

Consultada por el aporte de la participación femenina a la industria minera, la ministra Hernando expresó que las inclusión de las mujeres hace que la industria sea obviamente más diversa y sostenible. No obstante, aseveró que lo relevante es la diversidad, afirmando que “como en toda actividad humana, implica no solo mayor participación de mujeres, sino también mayor participación de personas que no están dentro de los cánones que consideramos ´normales´ para trabajar en minería”.

A lo que añadió, "requerimos una industria que sea también reflejo de la sociedad chilena, que se enriquezca de nuevos puntos de vistas y experiencias, y hablo de personas indígenas, de la diversidad sexual, personas con discapacidad, etc. La inclusión hace que la minería se imponga nuevos estándares, que haya adecuaciones y nuevas formas de interrelacionarnos, esto redunda en una mayor valoración social de la minería, y que esta se proyecte como el sector productivo más importante de Chile.

¿Qué metas o desafíos espera alcanzar este 2023?

-En materia de igualdad de género, contamos en nuestra cartera con la Mesa Nacional Mujer y Minería, que es un ámbito de gestión público-privada, y se ha constituido como un aliado estratégico para avanzar en la inserción de la mujer en la industria minera, en ella participan el Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género, el Ministerio del Trabajo y Previsión Social, el Ministerio de Educación y más de una treintena de empresas del ecosistema minero, proveedores, representantes de la sociedad civil y consultoras expertas en el tema.

Durante 2022, la mesa conformó cuatro equipos para avanzar en diversas temáticas: educación, trabajo decente, diversidad e inclusión, indicadores y medición. Es precisamente en estos ámbitos en donde se va a focalizar nuestro trabajo para este año. 

En materia de educación queremos sistematizar las iniciativas del sector para fortalecer la participación de mujeres y diversidades en carreras y oficios mineros; respecto a trabajo decente, se generará un manual para la entrada en vigencia del Convenio 190 de la OIT, sobre eliminación de la violencia y acoso laboral y sistematización de buenas prácticas de prevención y abordaje de Maltrato y Acoso Laboral o Sexual (MALS); en diversidad e inclusión, queremos realizar un seminario de visibilización dirigido a toda la industria y elaboración de manual de recomendaciones y buenas prácticas en esta materia; y en indicadores y medición, queremos tener un set de indicadores para medir el impacto de los diversos compromisos que ha asumido la Mesa Nacional Mujer y Minería.  

Asimismo, vamos a avanzar en la transversalización del enfoque de género en toda nuestra oferta programática a través del FNDR, Convenios de Programación y fondos PAMMA, implementando las acciones de mejora propuestas en el diagnóstico que se realizó en 2022, orientadas a disminuir la brecha de participación de mujeres en el acceso a financiamiento público.

La Política Nacional Minera 2050 ha establecido metas respecto de la inserción de mujeres en minería; al año 2030 esperamos alcanzar una participación femenina en la industria del 20% y del 35% al 2050. Por otro lado, comenzar a medir la participación femenina en la mediana y pequeña minería. En términos de cargos directivos, es decir directoras, gerentas, subgerentas y jefaturas, se espera llegar a un 25% el 2030 y del 40% al 2050. Finalmente esperamos contar con políticas de diversidad e inclusión, conciliación laboral, familiar y personal en el 100% de las empresas medianas y grandes del sector al 2030.

Haciendo una retrospectiva de los últimos cinco años, ¿cuáles cambios has notado en el rubro minero en relación con la equidad y diversidad de género?

-Para ingresar a la industria minera, las mujeres hemos tenido que enfrentar no sólo prejuicios sobre nuestra capacidad y talento, sino que también acerca de creencias y mitos, como por ejemplo que las mujeres no podían ingresar a la mina porque “ésta se ponía celosa”. Esta restricción estuvo vigente en el código del trabajo hasta 1996. 

A eso se suman otras barreras como el tema de infraestructura, como la necesidad de habilitar baños o la necesidad de contar con tallas de ropas para mujeres, por ejemplo. Sin embargo, afortunadamente esto ha ido quedando atrás y, especialmente, la gran minería muestra cifras de evidente crecimiento en el número de mujeres trabajando en la industria.

De acuerdo con los registros del Consejo de Competencias Mineras y el Programa Eleva (CCM-Eleva), en su reporte del mes de marzo, la participación femenina en la industria minera desde un 7,1% en 2012 a un 17,4% en 2023, lo que significa un cambio bastante positivo. 

Junto con ello, un estudio de Cochilco arrojó que más del 60% de las mujeres que trabajan en el sector minero son menores de 40 años, lo que demuestra que se está dando un cambio cultural y que muchas más mujeres están interesadas en incorporarse a este sector que ha sido tradicionalmente ocupado por hombres.

Estas cifras nos demuestran que los cambios se están produciendo y que hoy en día ya no es extraña la convivencia entre hombres y mujeres en las faenas. Ya nadie se sorprende por esto, y la práctica a dado cuenta que esta convivencia no afecta negativamente la productividad, sino por el contrario contribuye a mejorar la calidad de vida en faena, estos testimonios los hemos escuchado de los propios mineros que, si bien en principio dudaban de la inclusión femenina, hoy en día, destacan a sus colegas mujeres. 

¿Qué le diría a otras mujeres que están pensando sumarse a la industria minera?

Les diría que la industria minera está abriendo espacios para las mujeres, sin embargo, para avanzar en este cambio es necesario que más mujeres se atrevan, que se preparen para ingresar a esta actividad, que estudien y se capaciten.

Hoy las condiciones laborales permiten que las mujeres puedan proyectarse en minería y pensar en hacer una carrera en el sector. La industria minera ha aceptado el desafío de alcanzar un 35% de fuerza laborar femenina para el 2050, es decir en los próximos 28 años debería ingresas miles de mujeres a trabajar en las diversas áreas de esta actividad. Será un salto cuantitativo y las invitamos a ser parte de esta gran transformación.

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