Proyecto Imán involucra al Presidente Piñera en otro posible conflicto de interés

Las negociaciones del proyecto minero se realizaron durante el primer mandato de Piñera, mismo año en el que el vendedor fue nombrado por el mandatario como su representante en el directorio de Enami.

El domingo pasado, Ciper publicó una investigación que conecta a la familia Piñera Morel con la compra de un proyecto minero de hierro y escandio en el Sur de Vallenar, en la región de Atacama. El conflicto se inició durante el primer gobierno de Sebastián Piñera cuando, en medio de las negociaciones para adquirir el proyecto, el vendedor fue nombrado por el actual Presidente de la República como su representante en el directorio de Enami.

El 31 de enero de 2011, 14 pertenencias mineras ubicadas 10 kilómetros al suroeste de Vallenar se vendieron a un fondo de inversión que corresponde a la familia Piñera Morel, por US$13 millones. Estos participaron a través de FIP Mediterráneo y tenían como socios a la familia de Carlos Délano, amigo del Presidente Piñera y con quien también realizó los negocios de la Minera Dominga. 

De acuerdo con la información confirmada por Ciper con uno de los asesores del vendedor, cuando Arnaldo Del Campo, dueño de las pertenencias, fue nombrado como director de la Enami, ya habían empezado las negociaciones que involucran a los Piñera Morel. 

Así como con el proyecto Dominga, la compraventa se realizó bajo la sociedad Minería Activa, con la diferencia de que se creó otra sociedad con el nombre Minería Activa Dos Spa para la compra de esta iniciativa. Dicha sociedad se constituyó el 21 de octubre de 2010, antes de concretarse la transacción.

Según la investigación, Minería Activa Dos tenía el 50% del Fondo de Inversión Privado Imán, el que a su vez poseía el 50% de la sociedad que compró las pertenencias, Minería Imán Spa. Los Piñera Morel tuvieron un rol como inversionistas en el negocio, ya que el directorio de las sociedades, Minería Imán Spa y Minería Activa Dos estaban a cargo de Nicolás Noguera Correa, representante del fondo de inversión de la familia.

“En ese minuto Arnaldo tenía muchas ofertas, pero de chinos y de otra gente, por mucha más plata. Pero eran ofertas de gente que uno no conocía, de sociedades que estaban fuera de Chile, de paraísos tributarios. Entonces, le dijimos que era preferible que sea menos dinero, pero que sea de verdad. En ese minuto se creó un fondo de inversión privado, donde Arnaldo participó, pero después los inversionistas (Délano y sus socios) dijeron ‘sabes que nosotros no te compramos las acciones del fondo de inversión, sino que la pertenencia misma’. Así que constituimos una sociedad y metimos ahí las pertenencias”, indicó a Ciper, Christian Aste, el abogado tributario que trabajó con Arnaldo Del Campo durante la venta de Imán.

Conformación de la sociedad Huentelauquén

La información entregada por Aste coincide con la publicación del Diario Oficial que indica la constitución de la sociedad Imán S.A. el 12 de octubre de 2010, pero ante la negación de los inversionistas aliados de Délano de comprar acciones a un fondo privado, seis días después el socio del negocio, Juan Cristóbal Jaramillo Jaramillo, junto a Aste, constituyeron la sociedad Huentelauquén S.A., la que compró las acciones de Imán S.A. y se quedó con las pertenencias mineras.

El 31 de enero de 2011, Huentelauquén S.A, como vendedor, y las sociedades compradoras Minería Activa Uno y el Fondo de Inversión Privado Rucapangui, firmaron el contrato de opción de compraventa del proyecto Imán. Estas últimas ligadas al grupo de inversión de Délano y la familia Piñera Morel.

Dentro de dicho primer contrato aparecen: Juan Cristóbal Jaramillo, como representante de Huentelauquén; Pedro Ducci, ejecutivo de confianza de los Délano y el hijo de Carlos Délano, como representantes del Fondo de Inversión Privado Rucapangui; Nicolás Noguera Correa y Juan Paulo Bambach, en representación de Minería Activa Uno Spa.

En un inicio, el negocio fue por US$19 millones en dos pagos. El primer pago se realizó al firmar la opción de compraventa y el resto en un plazo máximo de tres años, pero si se hacía la compra antes del 29 de febrero de 2012, el precio bajaba a US$13 millones. Debido a que se realizó la compra antes de esa fecha, el contrato fue modificado. 

Defensa desde La Moneda

Así como con en el caso del proyecto Dominga, desde La Moneda informaron a Ciper que el Presidente no participa desde 2009 en la gestión o administración de ninguna empresa o negocio y aseguraron que nunca ha participado en Mediterráneo FIP durante su administración. Además, indicaron que sus inversiones y las de su familia se encuentran en fideicomisos ciegos. 

Asimismo, el abogado Aste afirmó al medio de comunicación que no tenía conocimiento de la relación que había con las sociedades compradoras y la familia Piñera Morel. Mientras que, Nicolás Noguera Correa declaró que en la administración del FIP Mediterráneo “nunca ha participado don Sebastián Piñera”.

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En cuanto a la designación de Arnaldo Campo en la Enami, desde La Moneda señalaron “la designación de directores de empresas públicas se efectúan sobre la base de propuestas de las entidades estatales encargadas de su administración”.

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