Lindley Maxwell: “El Hidrógeno será la principal industria de nuestro país”

Energía, es una de las líneas de investigación que está proyectando CICITEM en su hoja de ruta 2020-2025, y para ello ha incorporado a un nuevo Investigador, especialista en el área, para potenciar la especialización en Hidrógeno Verde

Lindley Maxwell Villacorta es Licenciado en Química de la Universidad Católica del Norte, con un Magíster en Química Inorgánica Avanzada, Doctor en Química Inorgánica Molecular, y con un post doctorado en la Universidad de Berkeley, Estados Unidos, recién finalizado. 

- ¿Cuál es el objetivo principal de la Línea de Investigación en Energía de CICITEM?

El objetivo principal es poder avanzar en el desarrollo y la investigación del principal recurso renovable, estratégico y sustentable de la Región, que es el Hidrógeno; en función de la producción, el almacenamiento y el uso que ya está situado como el combustible del futuro. 

Por otro lado, también apuntamos a aportar al desarrollo de la transición energética, por la vía del almacenamiento de electricidad en baterías de litio y en celdas de combustible. 

- Pero, ¿Existe una demanda real de Hidrógeno en el mundo?

En lo inmediato no. Como Centro, estamos pensando en las cosas que se vienen a futuro, y por lo tanto, desarrollar esas capacidades que en el mediano plazo van a ser demandadas por parte de la economía mundial. 

Desde esa lógica, hoy sí tenemos una demanda real por el litio, y debemos atender las dificultades técnicas que este está presentando para el desarrollo de las baterías. Por eso, nuestra línea de energía viene a centrar sus esfuerzos en la investigación de electrolitos sólidos, que son el espacio que permite almacenar electricidad, pero con nuevos materiales que le den mayor eficiencia a esas baterías. 

Ahora bien, el hidrógeno se presenta como la alternativa viable para el almacenamiento de grandes potencias de energía; todos los estudios que existen en el mundo nos dicen que el Hidrógeno – ya al 2030 – va a ser un producto muy comercializado a nivel mundial. 

Por ende, el desarrollo tecnológico para llegar a ser efectivamente un productor mundial de Hidrógeno, nos obliga a estar previniendo 10 años antes, a lo menos, cuáles van a ser esos desafíos y por tanto, prepararnos en capital humano, investigación científica, desarrollo tecnológico, en sistemas de almacenamiento más eficientes, en sistemas de transporte más seguros, entre otros, de manera que todos estos desarrollos permitan una verdadera industria del hidrógeno que de respuesta a los requerimientos mundiales. 

Entonces, ¿Hidrógeno o Litio?

Yo te digo inmediatamente que los dos. El problema es que el litio hoy sirve para el almacenamiento de bajas potencias; o sea nos sirve para las baterías de equipos electrónicos, para los autos o los vehículos menores, pero ya cuando hablamos de almacenamiento de electricidad de grandes potencias; por ejemplo, el cómo la energía fotovoltaica se almacena para que en la noche se pueda también inyectar al sistema, ahí el litio no puede competir por la magnitud de las baterías que tendría que haber, y porque es un material que con el tiempo se va degradando. 

Adicionalmente, el Centro tanto en materia energética, como en todas las líneas que nosotros tenemos como investigación, se ha enfocado con una mirada del desierto de Atacama como un recurso renovable. Y en esa lógica, es que cuando nosotros miramos al litio, lo vemos como un recurso que es finito. O sea, el litio en un momento determinado se puede acabar. 

El Hidrógeno, en cambio, es un recurso renovable, ya que se produce con 2 elementos clave: el sol y el agua desalinizada. Entonces, además de ser un recurso renovable, es sumamente estratégico, porque es el combustible del futuro, con una particularidad, que es la pertenencia regional, ya que contamos con un laboratorio natural privilegiado y único en el mundo para producirlo. 

Entonces, a través del Hidrógeno, no solo tenemos la posibilidad de almacenar grandes potencias de energía, sino también la posibilidad de hacer funcionar vehículos de gran tonelaje, fundiciones, termoeléctricas, y mucho más, al ser también un combustible. 

Por lo tanto, ¿litio o hidrógeno? La verdad, son los dos. 

¿Podemos decir entonces, que el Hidrógeno podría ser el nuevo sustento del país?

No, el hidrógeno va a ser la nueva viga maestra de Chile. El hidrógeno va a ser, a partir de unos 15 años, la principal industria del país.

Hay que pensar que los acuerdos internacionales sobre cambio climático, que surgen a partir de la COP25, que ha suscrito nuestro país, al igual que las principales potencias del mundo, apuntan a dirigir todos los esfuerzos a que haya un consumo de combustible que no sean combustibles fósiles, porque estos producen gases de efecto invernadero. 

Entonces, la industria del Hidrógeno se empieza a posicionar en cuanto es un combustible que no solo puede llegar a competir en costos con el petróleo, sino que además es un combustible que sus residuos no son contaminantes, y no producen gases de efecto invernadero, sino que sus residuos son agua. 

¿Cómo está hoy Antofagasta para enfrentarse a esta potencial producción de Hidrógeno?

Estamos preparándonos para ese desafío. CICITEM, por encargo del Gobierno Regional ha establecido su línea de investigación en Energía, porque se está viendo precisamente que el desafío en el corto plazo, estamos hablando de 15 años – en economía esto es bastante poco – vamos a ser sobre demandados, y el desafío de la región ha sido tener estos desarrollos regionales, capital humano de la región preparado, e infraestructura   para enfrentar una industria tan potente como el mundo le va a demandar a Chile, y en particular a la Región de Antofagasta. 

Desde esta perspectiva, ¿es posible que desde la Región surjan soluciones científicas o tecnológicas que después sean utilizadas a nivel global?

Ese es nuestro desafío, por eso es que no estamos trabajando en electrolizadores o similares. Nosotros no vamos a enfocar nuestros esfuerzos en desarrollo de tecnologías de generación de Hidrógeno, porque esas ya existen mundialmente. Vamos a centrar nuestros esfuerzos en sistemas de almacenamiento eficientes y seguros. Ese es el desafío tecnológico que hay a nivel global. Y por otro lado, en desarrollar investigaciones en almacenamiento y transporte de hidrógeno, porque son hoy las materias que están presentando brechas tecnológicas y hay que solucionarlas para que la industria del hidrógeno pueda ser eficiente, segura y masiva.  

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