Capacitación online y tecnología se posicionan para cumplir las metas en reducción de tiempos para ingresar a faena

Alcanzar un máximo de 30 días para el ingreso de trabajadores de las operaciones al 2030 y de 15 días al 2050, es una de las metas incluídas por la Política Nacional Minera 2050.

Uno de los principales cuellos de botella identificados en la gran minería en materia de productividad, hace relación a los tiempos de acreditación de los trabajadores y trabajadoras de empresas proveedoras para ingresar a las operaciones, generando un costo anual promedio de US$ 500 mil por cada empresa minera. De hecho, de acuerdo a datos de la Comisión Nacional de Productividad, este proceso dura en promedio 38 días, e incluso, puede llegar a tomar 74 días en caso de que el proceso se complique. 

Frente al desafío de aumentar la producción de cobre en los próximos años -cuyas proyecciones por parte de Cochilco apuntan a un crecimiento anual de 1,7% a 2031- disminuir estos tiempos de acreditación se hace estratégico, siendo incluso una de las metas de la Política Nacional Minera 2050, que estableció “la reducción del tiempo, a un máximo de 30 días, para el ingreso de trabajadores de las operaciones al 2030 y de 15 días al 2050, a través de homologación en la acreditación de todos sus trabajadores directos e indirectos”.

Por ello, el uso de la tecnología y del e-learning serán clave para lograr estas metas, permitiendo una rápida y efectiva adquisición de habilidades y conocimientos necesarios para desempeñarse de manera segura y eficiente en el lugar de trabajo. Empresas como Codelco, han logrado disminuir estos tiempos al implementar la metodología de e-learning para ingreso a faenas, disminuyendo de 38 a 10 días el proceso, con un ahorro superior a los US$25 millones de dólares en sus operaciones entre traslados y disminución de tiempos.

A raíz de la pandemia, la capacitación online tuvo un crecimiento explosivo pasando de un 8% en 2018 a un 53% en 2022 según CCM-Eleva; y en paralelo, la tasa de accidentabilidad en la gran minería ha disminuido de un 0,18% anual desde 2018 a un 0,12% en 2023 según el informe de seguridad y empleo de Sonami. En este contexto es que el uso de tecnología y análisis de datos ha sido clave para identificar y abordar la seguridad ocupacional, permitiendo la implementación de medidas preventivas personalizadas a través de la capacitación.

El CEO de Mine Class, Claudio Valenzuela, indicó que “al establecer una correlación entre la capacitación en línea y la reducción de accidentes en minería, esta es positiva, lo que resalta la importancia de la formación continua y específica para las y los trabajadores mineros, adaptada a las demandas y riesgos del sector. Gracias al e-learning, la seguridad laboral se ha vuelto más accesible, flexible e interactiva, con ventajas en la formación en seguridad laboral, como: accesibilidad, personalización del proceso de aprendizaje, interactividad, trazabilidad y actualización de contenidos”. 

Durante el año 2022, la capacitación en línea fue ampliamente adoptada por la mayoría de las empresas mineras, y para el año 2023, evolucionó hacia una modalidad híbrida. Entre los objetivos a los que se destinó mayor cantidad de recursos, de acuerdo a CCM-Eleva, hacen relación a “la disminución de brechas en competencias técnicas, con un promedio de un 35% de los recursos asignados, además del cumplimiento de estándares de seguridad laboral, con un promedio de un 19%”.

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