Corte ecuatoriana detuvo actividades de proyecto minero de Codelco

La operación del proyecto minero, que tiene una extensión de 4.829 hectáreas y se estima que produciría anualmente 210.000 toneladas de cobre, estaba prevista para el año 2024.

La Corte de Imbabura ha ordenado la detención inmediata de las actividades del Proyecto Minero Llurimagua, en el norte de Ecuador, en el que participa la empresa estatal chilena Codelco, debido al riesgo que representa para la riqueza natural de la región. Según informan los abogados de los demandantes, la sentencia señala que se debe suspender cualquier actividad minera en la zona de influencia del proyecto hasta que se cumplan con los requisitos establecidos por la Corte Constitucional para este tipo de iniciativas, como la consulta previa a las comunidades.

El proyecto, que cuenta con la participación de la estatal ecuatoriana Enami y la filial de Codelco, Emsaec, ha sido objeto de una larga batalla legal por parte de la comunidad de Intag, quienes han luchado contra la extracción minera durante tres décadas. Los demandantes argumentaron que el Estado ecuatoriano concedió los permisos para el proyecto con estudios de impacto ambiental que omitían planes de protección para especies en riesgo, como la arlequín hocicuda (Atelopus longirostris), que se creía extinta desde hace 30 años, y la rana cohete resistencia, una nueva especie descubierta en Llurimagua.

La sentencia dictada por la Corte considera que se vulneraron los derechos relativos a la protección de la naturaleza y la consulta ambiental de las comunidades, y se exige que se realice una nueva "consulta" a los pobladores para otorgar la licencia ambiental. La operación del proyecto minero, que tiene una extensión de 4.829 hectáreas y se estima que produciría anualmente 210.000 toneladas de cobre, estaba prevista para el año 2024.

Cabe mencionar que los científicos han encontrado en el proyecto minero al menos 34 especies de anfibios, 22 de ellas en peligro de extinción. Ecuador, que cuenta con una Constitución que consagra la protección de la naturaleza, alberga unas 650 especies de ranas, de las cuales casi un 60% está en riesgo o en peligro crítico de desaparecer.

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