Gremios mineros piden suspender licitación de litio por "comprometer la industria chilena"

La Cámara Chilena de la Minería del Litio y la Asogemin pidieron participar en la consulta para resolver si las bases de la licitación pública infringen las normas de la libre competencia.

Este martes, la Cámara Chilena de la Minería del Litio y la Asociación Gremial de Pequeños Industriales Mineros (Asogemin) presentaron un documento al Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) para participar en la consulta para resolver las bases de la licitación pública que presentó el Ministerio de Minería.

El pasado 10 de diciembre, la única organización que participaba en la consulta para resolver si las bases de la licitación pública del Ministerio de Minería infringen las normas que protegen la libre competencia, era la compañía minera Salares del Norte.

Por este motivo, las asociaciones gremiales solicitaron que se suspenda la licitación cuestionada por el TDLC, que el Ministerio de Minería pretende adjudicar en unos días más. 

¿Cuáles son los cuestionamientos?

El cuestionamiento se basa en las condiciones de la licitación. Los gremios manifiestan que se trata de un proceso irregular ya que, solo en unas pocas semanas, el Ministerio de Minería intenta adjudicar una licitación que compromete la industria chilena de litio por casi 30 años.

En el documento expresaron que “se quiere adjudicar, a toda costa, verdaderos monopolios para la explotación del litio en una licitación en plazos ínfimos nunca vistos para una licitación de esta envergadura, y con reglas que evidentemente favorece a las grandes mineras transnacionales”.

Junto a esa acusación se añadió que, según las agrupaciones, el hecho “coincide con que se quieren cerrar los contratos justo antes de terminar su mandato la actual administración y que entre en funciones un gobierno de oposición. El interés común del país está en juego”.

Uno de los puntos que cuestiona el gremio es la exigencia de acompañar boletas de garantía por casi $400 millones y $800 millones. A esto le califican como “un fomento al monopolio legal que empezó con las dos últimas licitaciones”.

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